Reflexión

INDISPENSABLE REFLEXIÓN

Sobre el Sedevacantismo se ha dicho lo que se ha querido, muchos han opinado sobre esta posición teológica y canónica católica sin conocer en profundidad sus verdaderos orígenes y desarrollo, sus verdaderos protagonistas --eclesiásticos de la mayor relevancia jerárquica como intelectual--, sus verdaderos y graves fundamentos dogmáticos, su imperiosa razón de defender a los católicos de la grave apostasía y cisma en el que ahora viven y malviven. Paradójica y curiosamente sus máximos enemigos y detractores han sido aquellos que se dicen "defensores de la tradición católica", estos son los falsos tradicionalistas, todos ellos ex miembros de la FSSPX a la cual hoy día calumnian y difaman con un diabólico resentimiento; dirigidos por una élite infiltrada con psudosteólogos que inventaron laberínticas "tesis" rabínicas-dominicas-jesuíticas, y de una gran malicia al servicio del complot judeo-masónico, y secundados por la complicidad y servilismo de una mayoría de incautos que movidos siempre por la ingenuidad de una cómoda negligencia se alimentan de las "teologías" y de los "teólogos" del facebook o de los blog de la internet. Frente a todos estos paracaidístas devenidos en estos últimos meses al "sedevacantismo" los hay de muchos colores, entre ellos contamos a los desilucionados por el coqueteo de Jorge Bergoglio con los Protestantes, Judíos y Musulmanes, como si Ratzinger, Wojtila y Montini no lo hubiesen hecho antes, estos nuevos "sedevacantistas" creen que solo Bergoglio es hereje formal y material y por lo tanto no es papa, pero los muy incautos "ignorantes en la cuestión" aceptan la misa nueva y los sacramentos dados con el nuevo ritual inválido e ilegítimo de Paulo VI. Los Católicos fieles creemos firmemente que el último Papa de la Iglesia Católica Apostólica Romana fue S.S Pío XII y que de allí por defecto y consecuencia de la Grana Apostasía ha cesado la institución del cónclave y cualquier iniciativa al respecto, solo será una delirante intentona.

miércoles, 25 de mayo de 2011

CONFIRMACIONES EN LA MISIÓN NTRA. SRA. DEL CARMEN

El pasado Domingo Mons. Luis Argueta administró el Sacramento de la Confirmación a niños y jóvenes de la Misión Ntra. Sra. del Carmen que nuestra Sociedad Religiosa viene llevando acabo desde hace dos años en la Ciudad de Sgo. del Estero. Durante el sermón Mons. Argueta nos exhortó a vivir como verdaderos cristianos y a no ser meros espectadores sino a participar de lleno en el apostolado que los sacerdotes realizan; entre otras palabras pidió a los confirmados y a sus padrinos ser soldados de Cristo en un mundo que cada día cava su propia fosa al no reconocer a Jesucristo como Dios y Maestro.
Finalizada la ceremonia los presentes aprovecharon la visita del Sr. obispo para saludarlo, tomarse algunas fotos con él y realizarle algunas preguntas.
Luego se compartió un almuerzo en casa de unos files y amigos de la Misión en dónde Mons. degustó una comida típica de Santiago, como lo es el locro y las empanadas criollas, entre cantos y música folclórica.









domingo, 15 de mayo de 2011

CONFIRMACIONES 2011

Se realizaron en la Misa de esta mañana en nuestra Capilla de Vedia y fueron conferidas por S.E.R. Monseñor Luis Argueta.

El sacramento de la Confirmación es uno de los tres Sacramentos de iniciación cristiana. La misma palabra, Confirmación que significa afirmar o consolidar, nos dice mucho. En este Sacramento se fortalece y se completa la obra del Bautismo. Por este Sacramento, el bautizado se fortalece con el don del Espíritu Santo. Se logra un arraigo más profundo a la filiación divina, se une más íntimamente con la Iglesia, fortaleciéndose para ser testigo de Jesucristo, de palabra y obra. Por él es capaz de defender su fe y de transmitirla. A partir de la Confirmación nos convertimos en cristianos maduros y podremos llevar una vida cristiana más perfecta, más activa. Es el sacramento de la madurez cristiana y que nos hace capaces de ser testigos de Cristo. El día de Pentecostés – cuando se funda la Iglesia – los apóstoles y discípulos se encontraban reunidos junto a la Virgen. Estaban temerosos, no entendían lo que había pasado – creyendo que todo había sido en balde - se encontraban tristes. De repente, descendió el Espíritu Santo sobre ellos –quedaron transformados - y a partir de ese momento entendieron todo lo que había sucedido, dejaron de tener miedo, se lanzaron a predicar y a bautizar. La Confirmación es “nuestro Pentecostés personal”. El Espíritu Santo está actuando continuamente sobre la Iglesia de modos muy diversos. La Confirmación – al descender el Espíritu Santo sobre nosotros - es una de las formas en que Él se hace presente en la Iglesia.

Institución

El Concilio de Trento declaró que la Confirmación era un sacramento instituido por Cristo, ya que los protestantes lo rechazaron porque - según ellos - no aparecía el momento preciso de su institución. Sabemos que fue instituido por Cristo, porque sólo Dios puede unir la gracia a un signo externo. Además encontramos en el Antiguo Testamento, numerosas referencias por parte de los profetas, de la acción del Espíritu en la época mesiánica y el propio anuncio de Cristo de una venida del Espíritu Santo para completar su obra. Estos anuncios nos indican un Sacramento distinto al Bautismo. El Nuevo Testamento nos narra como los apóstoles, en cumplimiento de la voluntad de Cristo, iban imponiendo las manos, comunicando el Don del Espíritu Santo, destinado a complementar la gracia del Bautismo. “Al enterarse los apóstoles que estaban en Jerusalén de que Samaria había aceptado la Palabra de Dios, les enviaron a Pedro y a Juan. Estos bajaron y oraron por ellos para que recibieran al Espíritu Santo; pues todavía no había descendido sobre ninguno de ellos; únicamente habían sido bautizados en nombre del Señor Jesús. Entonces les imponían las manos y recibían al Espíritu Santo”. (Hech. 8, 15-17;19, 5-6).





miércoles, 11 de mayo de 2011

NUEVO SACERDOTE PARA NUESTRA SOCIEDAD RELIGIOSA

El pasado Domingo 8 de Mayo se celebraron las fiestas patronales de Ntra. Capilla Virgen de Luján en Argentina, durante la Misa el diácono Gustavo Daniel Peña, recibió la Ordenación Sacerdotal de manos de S.E. R. Monseñor Luis Armando Argueta, venido desde el hermano país de México para dicha ocasión.
En esta breve crónica queremos agradecer a nuestros fieles y benefactores que nos aportan su ayuda para continuar esta obra de Iglesia, como así también al Sr. Obispo, al P. Fattore que viajó desde U.S.A., a nuestros amigos que con gran sacrificio se llegaron hasta Vedia para la ceremonia, a aquellos que nos hicieron llegar sus saludos deseándonos parabienes y a todos aquellos que rezan por nuestra Soc. Religiosa. Agradecemos a Dios Ntro. Sr. por el hermoso día que nos acompañó y que todo haya salido mejor de lo que teníamos previsto.
A continuación deseamos compartir con nuestros lectores y amigos algunos de los párrafos más relevantes del sermón predicado por Mons. Argueta durante la Sta. Misa de ordenación.
“La vida sacerdotal se ve por un lado como algo ingenuo; la prédica sacerdotal como algo ridículo, por otro lado se trata al sacerdote con burla y desprecio.
Este siglo y el anterior es más que pagano, el liberalismo ha logrado nulificar las potencias del alma, el hombre moderno ya no razona, tan solo busca la forma de divertirse, de entretenerse; la voluntad ha sido de tal manera cauterizada que la gente lo único que quiere es su propio bienestar, la comodidad y el confort.
Este es el hombre de hoy; tarea ardua la del sacerdocio, puesto que la misión sacerdotal es llevar las almas a Dios y a Dios a las almas.
El hombre se ha vuelto obstáculo de sí mismo. La conversión es de dos, de parte de Dios que nos da su Gracia y de parte del hombre que se somete a ella con su libre voluntad, el sacerdote solo es un medio, un canal, son las venas del Cuerpo Místico por las que circula la gracia.
Al ser un puente, el sacerdote no salva las almas; es Dios quién salva las almas, a través o a pesar del sacerdocio; no nos dejemos sorprender: es la Iglesia quien nos salva y no nosotros a Ella.
El hombre por abandonar a Dios y ha su Iglesia, se ha (desconvertido), se ha hecho depredador; por falta de caridad, se devoran unos a otros sin misericordia, no importa el estado social o condición social, la idea es destruir todo lo que tenga olor a Dios.
San Carlos Borromeo decía que las almas se salvan con las rodillas, significando con ello, los sacrificios y en especial el Sacrificio de la Cruz; la Santa Misa, que es de valor infinito y que tratamos de perpetuar con este nuevo scerdote.