Reflexión

INDISPENSABLE REFLEXIÓN

Sobre el Sedevacantismo se ha dicho lo que se ha querido, muchos han opinado sobre esta posición teológica y canónica católica sin conocer en profundidad sus verdaderos orígenes y desarrollo, sus verdaderos protagonistas --eclesiásticos de la mayor relevancia jerárquica como intelectual--, sus verdaderos y graves fundamentos dogmáticos, su imperiosa razón de defender a los católicos de la grave apostasía y cisma en el que ahora viven y malviven. Paradójica y curiosamente sus máximos enemigos y detractores han sido aquellos que se dicen "defensores de la tradición católica", estos son los falsos tradicionalistas, todos ellos ex miembros de la FSSPX a la cual hoy día calumnian y difaman con un diabólico resentimiento; dirigidos por una élite infiltrada con psudosteólogos que inventaron laberínticas "tesis" rabínicas-dominicas-jesuíticas, y de una gran malicia al servicio del complot judeo-masónico, y secundados por la complicidad y servilismo de una mayoría de incautos que movidos siempre por la ingenuidad de una cómoda negligencia se alimentan de las "teologías" y de los "teólogos" del facebook o de los blog de la internet. Frente a todos estos paracaidístas devenidos en estos últimos meses al "sedevacantismo" los hay de muchos colores, entre ellos contamos a los desilucionados por el coqueteo de Jorge Bergoglio con los Protestantes, Judíos y Musulmanes, como si Ratzinger, Wojtila y Montini no lo hubiesen hecho antes, estos nuevos "sedevacantistas" creen que solo Bergoglio es hereje formal y material y por lo tanto no es papa, pero los muy incautos "ignorantes en la cuestión" aceptan la misa nueva y los sacramentos dados con el nuevo ritual inválido e ilegítimo de Paulo VI. Los Católicos fieles creemos firmemente que el último Papa de la Iglesia Católica Apostólica Romana fue S.S Pío XII y que de allí por defecto y consecuencia de la Grana Apostasía ha cesado la institución del cónclave y cualquier iniciativa al respecto, solo será una delirante intentona.

martes, 21 de febrero de 2023

IN MEMORIAM : Thomas William Farrell (1935-2023)


Esta mañana en la Iglesia Inmaculado Corazón de María de la Ciudad de Tampa Fl, el Padre Emilio Fattore celebró la Misa de Requiem de cuerpo presente, junto a los fieles, familiares y amigos de nuestro fiel y benefactor el Sr. Thomás William Farrell que falleció la pasada semana. Cabe destacar que el Sr. Farrell fue un gran luchador y defensor de la Misa Católica, como así también del sacerdocio católico y del Honor de la Santa Iglesia, fue también un ejemplar esposo, padre de tres hijas y abuelo de una veintena de nietos. 
Todos los que le hemos conocido, no tenemos más que palabras de agradecimiento por su testimonio de hombre laico comprometido. Jamás hemos escuchado de su boca, alguna palabra de difamación o calumnia contra algún sacerdote u obispo, siempre atento a escuchar más que a hablar, gran rezador, devoto del Inmaculado Corazón de María.
Después de la Santa Misa  de un esmerado ágape en el salón parroquial, marchó el cortejo fúnebre al cementerio en dónde el P. Emilio realizó las exequias y la bendición de su morada final.
A nuestros lectores, fieles y almas rezadoras, les pedimos una oración por su alma.
Concedele Señor un descanso eterno, y brille para él la Luz Perpetua.











lunes, 13 de febrero de 2023

UN HEREJE Y APÓSTATA DE LA FE NO PUEDE SER NUNCA UN PAPA DE LA IGLESIA DE CRISTO


Un hereje es un bautizado que rechaza un dogma de la Iglesia Católica Romana. Un cismático es quien niega estar en comunión con el Papa verdadero o con los verdaderos católicos. Un apóstata es quien rechaza por completo la fe cristiana. Todos los herejes, cismáticos y apóstatas se separan automáticamente de la Iglesia Católica (Pío XII, encíclica Mistici corporis, 29 de junio de 1943). Por lo tanto, quien es hereje no es católico (Papa León XIII, encíclica Satis cognitum, 29 de junio de 1896). Y la mayoría de los herejes están convencidos que no niegan dogma alguno, cuando en realidad sí lo hacen.



Pablo IV, bula Cum ex Apostolatus Officio, 15 de febrero de 1559 (Bula Ex cathedra (infalible) que es imposible sea abrogada por el CIC (documento FALIBLE) como muchos pretenden, para justificar su adhesión a los últimos RECLAMANTES AL PONTIFICADO CATOLICO.): “6. Agregamos, [por esta Nuestra Constitución, que debe seguir siendo válida en perpetuidad, Nos promulgamos, determinamos, decretamos y definimos:] que si en algún tiempo aconteciese que un obispo, incluso en función de arzobispo, o de patriarca, o primado; o un cardenal, incluso en función de legado, o electo Pontífice Romano que antes de su promoción al cardenalato o asunción al Pontificado, se hubiese desviado de la fe católica, o hubiese caído en herejía:
(I) o lo hubiese suscitado o cometido, la promoción o la asunción, incluso si ésta hubiera ocurrido con el acuerdo unánime de todos los cardenales, es nula, inválida y sin ningún efecto;
(ll) y de ningún modo puede considerarse que tal asunción haya adquirido validez, por aceptación del cargo y por su consagración, o por la subsiguiente posesión o cuasi posesión de gobierno y administración, o por la misma entronización o adoración del Pontífice Romano, o por la obediencia que todos le hayan prestado, cualquiera sea el tiempo transcurrido después de los supuestos antedichos.
(III) Tal asunción no será tenida por legítima en ninguna de sus partes…
(IV) los que así hubiesen sido promovidos y hubiesen asumido sus funciones, por esa misma razón y sin necesidad de hacer ninguna declaración ulterior, están privados de toda dignidad, lugar, honor, título, autoridad, función y poder…
10. Por lo tanto, a hombre alguno sea lícito infringir esta página de Nuestra Aprobación, Innovación, Sanción, Estatuto, Derogación, Voluntades, Decretos, o por temeraria osadía, contradecirlos. Pero si alguien pretendiese intentarlo, sepa que habrá de incurrir en la indignación de Dios Omnipotente y en la de sus santos Apóstoles Pedro y Pablo.
Dado en Roma, junto a San Pedro, en el año de la Encarnación del Señor 1559, XV anterior a las calendas de Marzo, año 4º de nuestro Pontificado

+ Yo, Pablo, obispo de la Iglesia católica…”
San Roberto Belarmino: “Un papa que se manifieste hereje, por ese mismo hecho (per se) cesa de ser papa y cabeza, así como por lo mismo deja de ser un cristiano y miembro de la Iglesia. Por tanto, él puede ser juzgado y castigado por la Iglesia. Este es la enseñanza de todos los Padres antiguos, que enseñaban que los herejes manifiestos pierden inmediatamente toda jurisdicción”. (De Romano Pontifice, II, 30)
Enciclopedia Católica, “Papal Elections” [Las Elecciones Papales], 1914, Vol. 11, p. 456: “Desde luego, la elección de un hereje, de un cismático, o de una mujer [como Papa] será nula e inválida”.

Notas:
[1] The Papal Encyclicals [Las Enciclicas Papales], edición inglesa,, Vol. 1 (1740-1878), p. 256
[2] Decrees of the Ecumenical Councils [Los Decretos de los Concilios Ecumenicos], edición inglesa,, Sheed & Ward and Georgetown University Press, 1990, Vol. 1, p. 479.
[3] Von Pastor, History of the Popes[Historia de los Papas], edición inglesa, II, 346; citado por Warren H. Carroll, A History of Christendom[Una Historia de la Cristiandad], Vol. 3 (The Glory of Christendom[La Gloria de la Cristiandad]), edición inglesa, Front Royal, VA: Christendom Press, p. 571.

lunes, 16 de enero de 2023

LA GENTE NO ACUDE A MISA PORQUE NO SABE ESTO..... (Como siempre nos referimos a la Misa Católica no a las misas-parodias del Modernismo que hoy día usurpan los templos otrora Católicos)



EL PODER DE LA SANTA MISA


A la hora de tu muerte, tu mayor consolación será las Misas que durante tu vida oíste.
Cada Misa que oíste te acompañaran al Tribunal Divino y abogarán para que alcances el perdón.
Con cada Misa puedes disminuir el castigo temporal que debas por tus pecados, en proporción con el FERVOR que la oigas.
Con la asistencia devota a la Santa Misa rindes el mayor homenaje a la Humanidad Santísima de Nuestro Señor. La Santa Misa bien oída suple tus mayores negligencias y omisiones.
Por la Santa Misa bien oída se te perdonan todos los pecados veniales que estás resuelto a evitar, y muchos otros de que ni siquiera te acuerdas. Por ella pierde también el demonio el dominio sobre ti.
Además, ofreces el mayor consuelo a las almas benditas del Purgatorio.
Una Misa oída mientras vives te aprovechará mucho más que muchas que ofrezcan por ti después de tu muerte.
Te libras de muchos peligros y desgracias, en los cuales quizás caerías si no fuera por la Santa Misa.
Acuérdate también de que con ella acortas tu purgatorio.
Con cada Misa aumentas tus grados de gloria en el Cielo. En ella recibes la bendición del Sacerdote, que Dios ratifica en el cielo.
Durante la Misa te arrodillas en medio de una multitud de ángeles que asisten invisiblemente al Santo Sacrificio con suma reverencia.
Consigues bendiciones en tus negocios y asuntos temporales.
Cuando oímos Misa en honor de algún Santo Particular, dando gracias a Dios por los favores pedidos a este Santo no podemos menos de ganarnos su protección y especial amor, por el primer gozo y felicidad que de nuestra buena obra se le sigue.
Todos los días que oímos Misa estaría bien que, además de las otras intenciones, tuviéramos la de honrar al Santo del día.

jueves, 5 de enero de 2023

USO DEL VELO (o mantilla) EN LAS MUJERES DENTRO DEL TEMPLO


De acuerdo al Código de Derecho Canónico y a una costumbre inmemorial, las mujeres tienen la obligación, aun hoy en día, de cubrir sus cabezas en presencia del Santísimo Sacramento
El uso del velo en el cristianismo es sumamente importante y no un tema que le concierne “sólo” al Código de Derecho Canónico, sino a dos milenios de Tradición de la Iglesia, extendiéndose al Antiguo Testamento y a exhortaciones en el Nuevo Testamento. Al respecto, San Pablo escribió:
1 Corintios 11, 1-16
«Sed imitadores míos, como también yo lo soy de Cristo. Os alabo porque en todo os acordáis de mí y guardáis las tradiciones con firmeza, tal como yo os las entregué. Pero quiero que sepáis que la cabeza de todo hombre es Cristo, y la cabeza de la mujer es el hombre, y la cabeza de Cristo es Dios. Todo hombre que cubre su cabeza mientras ora o profetiza, deshonra su cabeza. Pero toda mujer que tiene la cabeza descubierta mientras ora o profetiza, deshonra su cabeza; porque se hace una con la que está rapada. Porque si la mujer no se cubre la cabeza, que también se corte el cabello; pero si es deshonroso para la mujer cortarse el cabello, o raparse, que se cubra. Pues el hombre no debe cubrirse la cabeza, ya que él es la imagen y gloria de Dios; pero la mujer es la gloria del hombre. Porque el hombre no procede de la mujer sino la mujer del hombre; pues en verdad el hombre no fue creado a causa de la mujer, sino la mujer a causa del hombre. Por tanto, la mujer debe tener un símbolo de autoridad sobre la cabeza, por causa de los ángeles. Sin embargo, en el Señor, ni la mujer es independiente del hombre, ni el hombre independiente de la mujer: Porque así como la mujer procede del hombre, también el hombre nace de la mujer; y todas las cosas proceden de Dios. Juzgad vosotros mismos: ¿es propio que la mujer ore a Dios con la cabeza descubierta? ¿No os enseña la misma naturaleza que si el hombre tiene el cabello largo le es deshonra, pero que si la mujer tiene el cabello largo le es una gloria? Pues a ella el cabello le es dado por velo. Pero si alguno parece ser contencioso, nosotros no tenemos tal costumbre, ni la tienen las iglesias de Dios».
De acuerdo a la enseñanza de San Pablo, las mujeres deben usar el velo como signo de que la gloria de Dios, no la propia, es el centro del culto. También como signo externo del reconocimiento, y sumisión, de la autoridad, tanto de Dios como de los esposos (o de los padres, de acuerdo al caso), y del respeto a la presencia de los Santos Ángeles en la Divina Liturgia. En el uso del velo se refleja el orden divino invisible y lo hace visible. San Pablo presenta esto claramente como una ordenanza, ya que es la práctica de todas las iglesias.
LEAMOS EL TESTIMONIO DE DOS LÍDERES DE LA IGLESIA PRIMITIVA:
¿Qué hará la mujer cristiana si descuidara esta ordenanza? ¿Callará la oración espontánea de agradecimiento? ¿Se enfrentará a la tentación sin el arma de la oración? ¿Dejará de cumplir con su Señor, privando a un alma necesitada de un testimonio? ¿Desafiará al Señor y menospreciará su mandato, orando y testificando sin el velo? ¿Deshonrará a su Señor o usará el velo durante todo el día para así encontrarse todo el tiempo en comunión con su Dios, dispuesta para testificar?
—Crisóstomo (344–407 d.c.)
Pero amonestamos a las mujeres que no dejen esta disciplina del velo ni por un momento, ni siquiera por una hora.
—Tertuliano (160–222 d.c.)
El Pontifical Romano contiene el imponente ceremonial de la consagración de los velos:
“Recibid el sagrado velo, para que podáis ser conocidas como habiendo despreciado al mundo, y que verdaderamente, humildemente, y con todo vuestros corazones, sois sujetas a Cristo como sus esposas; y que Él os defienda de todo mal, y llevaros a la vida eterna”(Pontificale Romanum, de benedictione).
San Pablo dice que una mujer sin velo es un deshonor:
“Al contrario, mujer que ora o profetiza con la cabeza descubierta deshonra su cabeza, siendo lo mismo que si se rapase.” (1Cor. XI:5).

lunes, 26 de diciembre de 2022

SOLEMNIDAD DE LA NATIVIDAD DE JESUCRISTO SEÑOR NUESTRO -2022-

MISA DE MEDIANOCHE (Misa de Gallo)











MISA DEL DÍA DE NAVIDAD





NAVIDAD EN LA IGLESIA INMACULADO CORAZÓN DE MARÍA EN TAMPA FL, -R.P. Emilio Fattore-



jueves, 8 de diciembre de 2022

SOLEMNIDAD DE LA INMCACULADA CONCEPCIÓN DE MARÍA Y FIESTAS PATRONALES DE LA CAPILLA VIRGEN DE LUJÁN EN VEDIA ARENTINA

 Con gran alegría celebramos esta mañana las Fiestas patronales de nuestra Capilla Virgen de Luján en la Ciudad de Vedia Provincia de Bs.As. . La Santa Misa cantada dio comienzo a las 9;00 hs. y en ella recibieron la Primera comunión los niños Matias Murgia y Jesús Muñoz Sangiacomo; después de la Misa procedimos a compartir un pequeño ágape en el nuevo salón parroquial, quiera Dios bendecir a estos niños, a sus familias y a la comunidad parroquial de Vedia.

El dogma de la Inmaculada Concepción de María Virgen fue proclamado por el Papa Pío IX el 8 de diciembre de 1854, en su bula Ineffabilis Deus.
"...declaramos, proclamamos y definimos que la doctrina que sostiene que la beatísima Virgen María fue preservada inmune de toda mancha de la culpa original en el primer instante de su concepción por singular gracia y privilegio de Dios omnipotente, en atención a los méritos de Cristo Jesús Salvador del género humano, está revelada por Dios y debe ser por tanto firme y constantemente creída por todos los fieles..." (Pío IX, Bula Ineffabilis Deus, 8 de diciembre de 1854)
La Concepción: Es el momento en el cual Dios crea el alma y la infunde en la materia orgánica procedente de los padres. La concepción es el momento en que comienza la vida humana.
-María quedó preservada de toda carencia de gracia santificante desde que fue concebida en el vientre de su madre Santa Ana. Es decir María es la "llena de gracia" desde su concepción. Cuando hablamos de la Inmaculada Concepción no se trata de la concepción de Jesús quién, claro está, también fue concebido sin pecado.










                     






viernes, 18 de noviembre de 2022

EL ESPLENDOR DE LA FE CATÓLICA EN LA SAGRADA EUCARISTÍA... : "Jornadas de fe". No-Do Congrés Eucarístic Barcelona 1952.

Estimados lectores y visitantes de nuestro humilde blog, hemos deseado compartir con ustedes este hermoso y valorable video sobre el XXXV -35- Congreso Eucarístico Internacional realizado en Barcelona España en el año 1952 y bajo el reinado de Su Santidad el Papa Pío XII (Último Papa de la Cristiandad) por los insondables designios de Dios.
Lo compartimos por que nos pareció de gran interes y en particular para las nuevas generaciones que solo tienen una imagen desdibujada de lo que fue la Iglesia de Dios ya que sólo ven o han visto espectáculos decadentes de la secta Modernista, que nada tienen que ver con el esplendor de la liturgia y ceremonias Católicas.
Aquí tristemente podemos apreciar como la "primavera" eclesial proclamada a los cuatro vientos por Angelo Roncalli -alias Juan XXIII, al convocar el Concilio del Vaticano II, fue para la Iglesia un crudo invierno y la liquidación de la Fe Católica en el orbe entero. Sirva entonces en este fin de semana largo, por lo menos en Argentina y cuando da comienzo al circo mediático del Mundial de Fútbol Qatar 2022, en dónde se tendrá a la borregada idiotizada, ver en familia este histórico documental.
¡Viva Dios! ¡Viva Jesucristo en el Santísimo Sacramento del altar! y ¡Viva la Virgen Inmaculada!
P. Mauricio María


RADIOMENSAJE DE SU SANTIDAD PÍO XII
A LOS PARTICIPANTES EN EL XXXV CONGRESO EUCARÍSTICO INTERNACIONAL REUNIDOS EN BARCELONA 
*

Domingo 1 de junio de 1952


Sea por siempre bendito y alabado el Santísimo Sacramento del Altar y la Purísima Concepción de María Santísima, concebida sin mancha de pecado original desde el primer instante de su ser natural.
Venerables Hermanos y amados hijos, representantes de todo el orbe católico, que en estos momentos clausuráis en Barcelona las grandiosas jornadas del trigésimo quinto Congreso Eucarístico Internacional.
¿Quién hubiera podido pensar cuando, en la tibia primavera de 1938, dirigíamos Nuestra palabra, en la tan hermosa como desdichada Budapest, al trigésimo cuarto Congreso Eucarístico Internacional, que en el siguiente íbamos a hacer oír Nuestra voz desde esta Sede Apostólica y después de un paréntesis tan largo como doloroso? Cargado estaba el horizonte; y las expresiones que allí se escuchaban eran ya para ponderar lo dichoso que el mundo sería, si quisiera seguir las exhortaciones del Sucesor de Pedro en favor de la paz.
Pero la voz fue desoída; el turbión descargó con estruendo y con estrago; y hoy de nuevo, el grito angustioso, que escapa de todas las gargantas, es el mismo de entonces: ¡la paz!
¡Cuánto se habla hoy de paz y de qué distinta manera! Para algunos, no es más que una formalidad exterior, hecha de palabras, impuesta por una táctica ocasional y constantemente contradicha por sus gestos y sus obras, tan contrarios a todo lo que dicen. Para nosotros no; para nosotros no hay más que una paz verdadera y posible, la de Aquel cuyo nombre es «Princeps pacis» (Is 9, 6) y cuyo Reino no consiste en goces terrenales, sino en el triunfo de la justicia y de la paz : «Non est enim regnum Dei esca et potus, sed iustitia et pax» (Rom 14, 17); una paz que se deduce como un imperativo ineludible de la fraternidad y del amor, que brota de lo más profundo de nuestro ser cristiano y que es el supuesto indispensable para otros bienes mayores y de un orden superior.
Os hablamos desde lejos, pero Nos parece que os vemos y que Nuestro espíritu se regocija al contemplar vuestra Asamblea; porque en torno a la Eucaristía todo habla de paz: el ágape fraterno, el ósculo previo y hasta el mismo símbolo de muchos granos de trigo. La paz es unidad; pues, ¿dónde ir a buscarla sino en este sacramento « totius ecclesiasticae unitatis»?[1]. Es fruto de la caridad; pues entonces, ¿dónde encontrarla, sino en este «sacramentum caritatis, quasi figurativum et effectivum»?[2]. Y si, como bien sabemos, los enemigos de la paz son la soberbia, la codicia y, en general, las pasiones desordenadas, ¿qué mejor remedio podremos anhelar que esta medicina celestial, con la cual crecen la gracia y las virtudes, somos preservados del pecado, se complementa nuestra vida espiritual[3] y, aumentando en el alma la caridad, son enfrenadas las pasiones?[4]
España ha tenido el alto honor, justo reconocimiento a su catolicismo íntegro, recio, profundo y apostólico, de dar hospitalidad a esta magna Asamblea, que añadirá a sus fastos religiosos una página, que ha de contarse entre las más brillantes de su fecunda historia; y en nombre de la vieja Madre España le ha tocado hacer los honores a la espléndida y próspera Barcelona, de la que no querríamos en estos momentos recordar ni la belleza de su situación, ni su clásica hospitalidad, ni su espíritu abierto siempre a todas las iniciativas grandes, sino más bien su tradición eucarística cifrada en tres nombres: el «Santo de la Eucaristía», que fue S. Ramón Nonato; un apóstol de la comunión cotidiana ya en el siglo XIII, que es Santa María de Cervelló; y un alma que subió a todas las alturas de la mística, nutriéndose algunas veces tan solo de Eucaristía, S. José Oriol.
España y Barcelona, o, mejor dicho, el trigésimo quinto Congreso Eucarístico Internacional, pasará al Libro de Oro de los grandes acontecimientos eucarísticos por su perfecta preparación y organización, por la amplitud y acierto de sus temas de estudio, por la brillantez y riqueza de las Exposiciones y certámenes que lo han adornado, por la imponente concurrencia presente, por el sentido católico que lo ha inspirado, especialmente recordando los hermanos perseguidos, y por el contenido social que se le ha querido dar, tan en consonancia con Nuestros deseos. Pero Nos deseamos mucho más: Nos queremos proponerlo como ejemplo al mundo entero, para que al veros —tantas naciones, tantas estirpes, tantos ritos — «cor unum et anima una» (Act 4,32) pueda comprender dónde está la fuente de la verdadera paz individual, familiar, social e internacional; Nos esperarnos que vosotros mismos, inflamados en este espíritu, salgáis de ahí como antorchas encendidas, que propaguen por todo el universo tan santo fuego; Nos confiamos que tantas oraciones, tantos sacrificios y tantos deseos no serán inútiles; Nos, reuniendo todas vuestras voces, todos los latidos de vuestros corazones, todas las ansias de vuestras almas, queremos concentrarlo todo en un grito de paz, que pueda ser oído por el mundo entero.
«¡Oh Jesús amorosísimo, escondido bajo los tenues velos sacramentales; cordero divino, perpetuamente inmolado por la paz del mundo! Oye finalmente las ardientes plegarias de tu Iglesia que, por boca de tu indigno Vicario, te pide para el mundo el fuego de la caridad, para que en ella se enciendan la unión y la concordia y, al calor de éstas, florezca en nuestra tierra árida y desolada el blanco lirio de la paz.
»¡Que la unción de tu gracia —bálsamo escondido, fármaco suavísimo— sane en las almas las desgarraduras producidas por el odio, para que todos se sientan hermanos, hijos de un mismo Padre, que se nutren en una misma mesa con manjar celestial!
»¡Que tus palabras de paz, que el amor que siempre rebosa de tu corazón inspiren a los regidores de las naciones, a fin de que sepan conducir los pueblos que tu les has confiado por los caminos de la auténtica fraternidad, base indispensable de toda felicidad y todo progreso!».
Hágalo así esa «Moreneta» de Monserrat, patrona del Congreso y madre de Cataluña, a la que desde aquí Nos parece ver en su nido de águilas, volviendo sus ojos maternales hacia vosotros y bendiciéndoos con todo amor; háganlo S. Pascual Bailón y todos vuestros Santos y Ángeles protectores; mientras que Nos, rebosando de gozo por haber podido ver en tan calamitosos tiempos un espectáculo tan hermoso como el que habéis ofrecido, os bendecimos a todos: a Nuestro dignísimo Legado; a Nuestros hermanos en el Episcopado con su clero y pueblo ; a todas las autoridades presentes, a cuantos han colaborado generosa-mente en la preparación y organización del Congreso, a cuantos en este acto final de tan solemne Asamblea, y fuera de él, oyen Nuestra voz; a la Ciudad Condal, a España y al mundo entero, cuyas ansias pacíficas hallan siempre completa correspondencia. en Nuestro corazón de Padre.

* AAS 44 (1952) 478-480.

[1] S. Th. 3 p. q. 83, art. 3, ad 6.

[2] Ib. q. 78, art. 3, ad 6.

[3] Ib. q. 79 et passim.

[4] Cfr. León XIII, Encicl. Mirae caritatis, die 28 Maii 1902, Acta Leonis XIII, vol. 22, 1903, p. 124.

jueves, 10 de noviembre de 2022

EL EXORCISMO MÁS FAMOSO DE SAN JUAN DE LA CRUZ




Cuando el Santo vivió en Ávila, ganó notoriedad como gran exorcista debido a su poder sobre los demonios. El caso más sonado, fue el de Sor María de Olivares Guillamas, agustina del Convento de Nuestra Señora de Gracia. Oriunda de Ávila, hizo sus votos en este convento en 1563. Llamó la atención por una serie de hechos extraños que no pudieron ser explicados. Sin nunca haber tenido estudios, sabía y era muy buena explicando las Escrituras. Se dijo que "habla todos los idiomas y conoce todas las ciencias". Vinieron muchos eruditos a conocerle y hablarle.
Algunos historiadores incluso hicieron una lista de hombres famosos que estudiaron el caso de ésta monja: Mancio de Corpus Christi, dominico, Bartolomé de Medina, también dominico, Juan de Guevara, agustino (sus conferencias en la Universidad de Salamanca fueron tan elevadas que fueron consideradas "Milagrosas"), fray Luis de León, maestro de muchas ciencias, estudioso de la Biblia, agustino. No sabemos si estuvieron involucradas otras personalidades de Ávila: Don Francisco de Salcedo, Julián de Ávila, o alguno de los distinguidos dominicos o jesuitas. En resumen, los teólogos eruditos que visitaban Ávila "consideraban el espíritu de esta monja bueno y su conocimiento milagroso".
Sin embargo, no todo estaba claro. El provincial agustino y probablemente el padre general vinieron a Ávila. La conversación con la monja no los tranquilizó en absoluto. Trataron el asunto con cautela. Se enteraron de la santidad, espíritu y conocimiento de Fray Juan de la Cruz. Por eso hicieron todo lo posible para que viera a la monja. Ellos insistieron, pero Juan se negó, probablemente porque no tenía experiencia en este campo y porque era joven. Tenía por entonces 32 años.
El superior agustino le dio permiso para entrar y salir del monasterio cuantas veces fuese necesario y así pudiera investigar el caso excepcional sin obstáculos. Acordaron una fecha para la primera reunión de inmediato. A la hora señalada entró en la iglesia fray Juan detrás de la reja del coro se encontraba la monja. Ella siempre sorprendía a todos con un lenguaje agudo, dichos buenos e ingeniosos. “Sin embargo, cuando vio al fraile pequeño y poco llamativo, no pudo decir nada. Atónita, comenzó a temblar y a sudar como una culpable en la corte. No intercambiaron ni una sola palabra".
Fray Juan salió y en secreto le dijo al padre general que la monja había sido poseída por un espíritu maligno y que los exorcismos tendrían que repetirse muchas veces. El superior estuvo de acuerdo. A partir de ese momento, fray Juan podría hacer lo que creyera conveniente en este asunto. Así que al final accedió a ayudar. Años más tarde, dijo que antes de iniciar el exorcismo, "informó a los inquisidores del distrito que se le había permitido hacer lo que fuera necesario" (Biblioteca Mística Carmelitana 14, 190).
Empezaron a suceder cosas increíbles. Fray Juan, sin darse cuenta del riesgo que había corrido, comenzó a prepararse espiritualmente: oró, ayunó, hizo penitencia y realizó diversas austeridades. Dedicó días y semanas enteros al trabajo: exorcismos, reuniones, catequesis. Quería liberar a la pobre poseída no solo del demonio, sino también de la confusión mental de la que había sido víctima.
Satanás se negó a dejar el cuerpo, alegando que la monja era de su propiedad. Ella se entregó a él voluntariamente, firmando el pacto con su propio nombre y sellándolo con sangre. Fray Juan no se rindió y un día, durante la misa, se le apareció este documento. Lo quemó de inmediato.
El último ataque fue excepcionalmente fuerte. Los exorcismos se convirtieron en un espectáculo impactante. Después de largos desacuerdos y discusiones, los espíritus malignos “se fueron gritando que desde la época de Basilio nadie se les había opuesto con tanta fuerza. La monja se desmayó, pero luego volvió a ser ella misma. Estaba sentada en el suelo descansando después del exorcismo.
Fray Juan preparó un memorando en el que presentó su opinión sobre el asunto. La Santa Inquisición de Valladolid envió materiales procesales al tribunal principal de Madrid. El 23 de octubre de 1574 llegó una carta de Madrid: “Inmediatamente después de recibirla, el padre Juan de la Cruz, carmelita descalzo, debe comparecer ante el Tribunal de la Santa Inquisición. Será interrogado sobre el memorial enviado a esta Inquisición ".
Fray Juan fue a Valladolid. En los primeros días de noviembre también fue llevada allí María de Olivares, y fue recluida en un convento.
Fray Juan, gran exorcista con el poder de luchar contra los espíritus malignos, se hizo conocido. En una carta a la priora de Medina del Campo, Inés de Jesús, en el otoño de 1574, la Madre Teresa de Jesús escribió: “Hija mía, lamento mucho la enfermedad de la Hermana Isabel de San Jerónimo. Les envío al Padre Juan de la Cruz para que la sane. Dios le dio la gracia de expulsar demonios de los cuerpos. En Ávila, acaba de liberar a cierta persona de tres legiones de demonios. En nombre de Dios, exigió que le dijeran quiénes eran. Le obedecieron de inmediato.
Fray Juan fue a Medina del Campo y se encontró con una monja que se creía que estaba poseída. Se dio cuenta de que había habido un error. Isabel de San Jerónimo estaba simplemente mentalmente enferma. Murió el 23 de noviembre de 1582.
El caso de María de Olivares fue el más difícil y sin duda el más famoso, pero no el único en el que ayudó Juan de la Cruz.
P. Jose Vicente Rodriguez OCD