Reflexión

INDISPENSABLE REFLEXIÓN

Sobre el Sedevacantismo se ha dicho lo que se ha querido, muchos han opinado sobre esta posición teológica y canónica católica sin conocer en profundidad sus verdaderos orígenes y desarrollo, sus verdaderos protagonistas --eclesiásticos de la mayor relevancia jerárquica como intelectual--, sus verdaderos y graves fundamentos dogmáticos, su imperiosa razón de defender a los católicos de la grave apostasía y cisma en el que ahora viven y malviven. Paradójica y curiosamente sus máximos enemigos y detractores han sido aquellos que se dicen "defensores de la tradición católica", estos son los falsos tradicionalistas, todos ellos ex miembros de la FSSPX a la cual hoy día calumnian y difaman con un diabólico resentimiento; dirigidos por una élite infiltrada con psudosteólogos que inventaron laberínticas "tesis" rabínicas-dominicas-jesuíticas, y de una gran malicia al servicio del complot judeo-masónico, y secundados por la complicidad y servilismo de una mayoría de incautos que movidos siempre por la ingenuidad de una cómoda negligencia se alimentan de las "teologías" y de los "teólogos" del facebook o de los blog de la internet. Frente a todos estos paracaidístas devenidos en estos últimos meses al "sedevacantismo" los hay de muchos colores, entre ellos contamos a los desilucionados por el coqueteo de Jorge Bergoglio con los Protestantes, Judíos y Musulmanes, como si Ratzinger, Wojtila y Montini no lo hubiesen hecho antes, estos nuevos "sedevacantistas" creen que solo Bergoglio es hereje formal y material y por lo tanto no es papa, pero los muy incautos "ignorantes en la cuestión" aceptan la misa nueva y los sacramentos dados con el nuevo ritual inválido e ilegítimo de Paulo VI. Los Católicos fieles creemos firmemente que el último Papa de la Iglesia Católica Apostólica Romana fue S.S Pío XII y que de allí por defecto y consecuencia de la Grana Apostasía ha cesado la institución del cónclave y cualquier iniciativa al respecto, solo será una delirante intentona.

miércoles, 26 de febrero de 2020

CUARESMA 2020


Hoy Miércoles 26 de Febrero y con la imposición de las sagradas cenizas la Santa Iglesia dio inicio al sagrado tiempo de Cuaresma.
Del latín quadragesima, se conoce como Cuaresma al periodo litúrgico de preparación para la Pascua de Resurrección. La Cuaresma, que se inicia con el miércoles de Ceniza y finaliza el Jueves Santo, es un tiempo de penitencia para los fieles de Católicos.
Podría decirse que la Cuaresma es el periodo de cuarenta días previo a la Pascua. Esta cifra (los cuarenta días) tiene un importante simbolismo de acuerdo a distintos fragmentos de la Biblia, como el retiro de cuarenta días que realizó Jesús en el desierto y el retiro de Moisés en el desierto durante la misma cantidad de días. El diluvio universal, por otra parte, duró cuarenta días, mientras que el pueblo judío marchó cuarenta años a través del desierto.
La Iglesia considera la Cuaresma como un tiempo de arrepentimiento, expiación de las culpas (por los pecados cometidos) y de conversión de vida, teniendo presente aquella frase: "recuerda hombre que polvo eres, y en polvo has de convertirte". Los fieles deben reforzar su fe para acercarse a Cristo a través de actos de reflexión y penitencia.
Las prácticas tradicionales de la Cuaresma, son el ayuno, la mortificación, la limosna y la abstinencia de carne, y se remontan al siglo IV. Comenzó como parte de un periodo de renovación para la Iglesia y aún se conserva en gran parte del mundo. Sin embargo, las penitencias han sido cada vez menos rigurosas, sobre todo en los países occidentales. El ayuno consiste en una única comida diaria, mientras que la abstinencia supone no comer carne.
Más allá del ayuno, la Cuaresma debe vivirse a través del Sacramento de la Confesión, la oración y las prácticas de los actos de misericordia. 
Las imágenes fueron tomadas de la Sta. Misa e imposición de ceniza en nuestra Capilla Virgen de Luján en la ciudad de Vedia Bs.As.



domingo, 23 de febrero de 2020

BENDICIÓN DE UN ANTIGUO Y RESTAURADO ARMONIO PARA LA CAPILLA VIRGEN DE LUJÁN DE NUESTRA CASA RELIGIOSA



La mañana de este Domingo de Quincuagésima y minutos antes de dar comienzo la Misa de las 9:00 hs. el Padre Mauricio procedió a bendecir el armonio que desde hoy acompañará con sus acordes y melodías todos los actos litúrgicos que han de desarrollarse en la Capilla de nuestra Casa Religiosa de la Ciudad de Vedia. El Armonio que cuenta con casi un siglo de vida, fue generosamente donado por el Cdor. Juan Manuel Sangiacomo, a quién se lo agradecemos.
La bendición de un órgano o Armonio es un acontecimiento sagrado y memorable, que suscita suave y místico gozo en el pueblo cristiano. 
Pues aquí, dentro de los muros de nuestra humilde Capilla en dónde diariamente se celebra el Sto. Sacrificio de la Misa y en donde convergen la piedad y la admiración de los fieles no solo de Vedia, si no de otros fieles esparcidos por distintas partes de la Argentina, aquí, decimos, es natural que la música —la más espiritual de las bellas artes— aporte su contribución para elevar a los hombres hasta el trono del Altísimo y les sugiera sentimientos de adoración, de gozo, de gratitud.
“Laudate Dominum in sanctis eius”. Alabad al Señor en su santuario. A estos umbrales del pueblo cristiano es conducido por los acordes del Armonio. Pues Él es el rey de los instrumentos sagrados musicales y como tal pertenece de una manera especial al templo, estando únicamente destinado a las alabanzas del Señor. Durante los sagrados ritos es el intérprete de los sentimientos de la comunidad, de las más nobles y santas emociones. A través de sus armonías penetran más fácilmente en la intimidad del alma las místicas secuencias de la acción sagrada: admiración y anhelo por la virtud, propósitos de purificación y de penitencia, deseo de una más ínfima comunicación con Dios, empeño en la lucha contra el mal, gusto anticipado de la bienaventuranza celestial. El alma se empapa con las místicas influencias de la Gracia. ¡Qué bellamente evocaba estos efectos San Agustín en su libro de las Confesiones!: 
“¡Cuántas lágrimas derramé al sentir embargar mi corazón por las suaves melodías de los himnos y de los cánticos que resonaban en tu Iglesia! Estas salmodias entraban por mis oídos y la verdad invadía mi corazón, encendía la llama del afecto y lloraba de consuelo” (Libro IX, c. 6).



jueves, 13 de febrero de 2020

DEMOCRACIA Y TV BASURA... Por: Walter Romero


La televisión argentina -y del mundo en general, emite tanta basura como basura deben soportar los espectadores para mantener la ficción electiva que el sistema democrático necesita. Andamos tan cortos de cultura política y necesitamos alimentar a los ciudadanos con una ración extra de "papilla democrática televisiva". En su ya clásico “Telebasura y democracia”, un texto publicado hace muchos años, exponía el filósofo que el "ocio democrático" resulta ser "tan básico como el trabajo”. Porque este ocio conforma al individuo libre (elector) como consumidor libre con opiniones propias (aunque no tan originales que hagan imposible las predicciones demoscópicas). Y por ello, concluía, "lo que la democracia habrá de prohibir no es el ocio, sino el ocio que disminuya las capacidades del consumidor sostenible".
Nuestro tiempo de trabajo, el de la producción, es ahora casi residual para la creación de valor con respecto al tiempo del ocio. En éste no sólo se recupera la fuerza de trabajo, o sea, el cuerpo. También se amoldan, gracias a la televisión y a internet (el más democrático y por tanto más destructivo medio) nuestra subjetividad e identidad. Y a la vez, generamos valor a través del consumo. Somos más útiles para el sostenimiento del sistema cuando no trabajamos que cuando lo hacemos. El Sistema necesita de borregos, no se seres pensantes.
La eficacia de la TV basura contribuye a mantener la ficción del espectador libre que juzga y vota y al votar consume. Y refuerza la idea esencial de que CONSUMO y DEMOCRACIA son indisolubles. Pero además, el ciudadano toma conciencia de la inutilidad del saber, del conocimiento. Triste realidad. Terrible realidad. Para alcanzar el éxito basta con aparecer en bolas en la TV. O cantando una canción cursi, o presentando un plato de cocina. Todo sin esfuerzo. Sin estudio. DEMOCRACIA, CONSUMO, IGNORANCIA.
La TV basura nos muestra (y nos vende) “ejemplos a imitar”. ¿Ejemplos de qué? Del más apestoso “mundo moderno” que se nos vino encima después de 1945. La victoria de “los buenos” condujo al mundo a un presente tétrico. Gran parte de la Argentina (y de la humanidad) está sumergida en un presente sin futuro. Almas vacias deambulando sin rumbo por un planeta a punto de desaparecer.

lunes, 10 de febrero de 2020

¿UN HOMBRE DEBE AMAR MÁS A SU ESPOSA QUE A SU MADRE? ... Lo mismo para el caso de las mujeres hacia sus padres

Por: Luz Ivonne Ream


"El hombre que trata a su mujer como una princesa es porque fue educado por una reina"
Este refrán conserva toda una verdad. Hay que agradecer a esas reinas que hayan sabido educar caballeros. ¡Gracias a todas ellas!
Sin embargo hay situaciones en las que parece que “la reina” pretende ser “princesa”. Ahora su hijo ya está casado y parece querer un lugar distinto al que le corresponde como madre. También puede suceder que el hijo siga con “mamitis” y no haya entendido todavía lo que significan aquello de “dejará a su padre y a su madre y se unirá a su mujer, y los dos se harán una sola carne” (San Mateo.19,5).
Y es que no se trata de amar más o de amar menos, de cuantificarlo, sino de que cada uno ocupemos el lugar que nos corresponde en la vida. Por eso, cuando uno se casa, la esposa debe ser la número uno en su vida, la mujer de su vida.
Por otro lado, es importante que la esposa acepte que la mamá siempre será el primer gran amor de su marido. Es la mujer que le dio la vida, que le crió y la que le dio todo el amor que pudo entregarle.
Sé que es un tema sensible por lo que trataré de redactarlo con suma delicadeza y lo haré pensando no solo como madre de solo varones, sino como experta en temas matrimoniales.
Para comenzar debo decir que para mí será una verdadera victoria cuando vea a mis hijos ya casados tratando como reinas a sus mujeres, dándoles su lugar como sus compañeras de vida.  Cuando se casen serán uno por lo que, ¡no seré yo la que les desuna! Mi lugar será siempre el de mamá, nada más.
Lo más triste y doloroso para la esposa es cuando su marido otorga siempre un lugar preferencial a su “mami” poniéndola por encima de ella. Esta situación le hace sentir denigrada, rechazada, pisoteada por el que prometió amarla y protegerla de por vida.
Señores, ningún esposo coherente debe colocar las opiniones o los deseos, gustos o caprichos de su madre por encima de los de su mujer.
Por otro lado, las suegras necesitan ser más inteligentes y nunca criticar a la nuera ni opinar, a no ser que se le pida, sobre diferentes cuestiones que afectan a su vida familiar y/o matrimonial como por ejemplo, el orden de la casa, la alimentación y educación de los niños o el estado de su relación de pareja.
Si una nuera no se siente amada ni aceptada por su suegra difícilmente tendrán una buena relación. Es como si ambas mujeres se sintieran amenazadas una por la otra. Si el marido se va siempre del lado de la mami, la situación se vuelve frustrante para la esposa.
Maridos, ambos amores son igual de importantes: la mamá siempre será su mamá y siempre le deberán respeto y amor. Ella los formó y fue la primera mujer que los amó y los seguirá amando incondicionalmente. Pero a su esposa le deben su total devoción, cuidados, fervor, protección, etc.
Son amores tan distintos y grandes a la vez que no tienen por qué entrar en conflicto. No ha de haber si quiera comparación. Pueden y deben amar a ambas. Su mamá, insisto, siempre será su madre, pero nunca ha de ser motivo para que su esposa se convierta en ex esposa.
Entendamos, no es competencia ni rivalidad, sino poner a cada una en el lugar que por derecho le corresponde. Trabaja y empéñate en tener un súper matrimonio y una súper relación con tu mamá, pero siempre recordando que tu matrimonio debe ser lo primero. Tu mujer, la primera, aún por encima de tus hijos.
Recuerda que libremente prometiste delante de Dios amarla, servirla, protegerla, cuidarla y dar tu vida por ella de ser necesario.

domingo, 2 de febrero de 2020

LA PURIFICACIÓN DE LA BIENAVENTURADA VIRGEN MARÍA, FIESTA DE LA CANDELARIA


Esta fiesta, con la cual se termina el tiempo de Epifanía, se nos presenta como el puente entre el misterio de Navidad y el de Pascua: María tiene todavía al Niño en sus brazos, pero lo lleva al templo para ofrecerlo. A los cuarenta días del Nacimiento de Jesús, María se dirigió a Jerusalén para ofrecer el sacrificio prescrito por la ley mosaica. Es una fiesta del Señor y, a la vez, una fiesta de María, la fiesta mariana más antigua de toda la liturgia, y la que completa el contenido simbólico de este tiempo de Navidad.
Con alegrías de Nochebuena, “la luz brilló en la tinieblas”; con el esplendor de Epifanía, “la luz envolvió a Jerusalén”, es decir, a la Iglesia; con la liturgia de hoy, en esa procesión, que recuerda el viaje de María a Jerusalén, la luz arde ya en nuestras manos y, como cantamos en el Introito, “hemos tomado en nuestras brazos la misericordia de Dios” –hecha carne-, pues el cirio que recibimos de la manos del sacerdote es un símbolo de Cristo, “luz para iluminar a las gentes”, como decimos en la liturgia de este día recogiendo las palabras del viejo Simeón.
"La cera –enseña San Anselmo-, significa la carne virginal del divino Infante; el pabilo, su alma; la llama, su divinidad.” Por eso los orientales llaman a esta fiesta el Encuentro (Hypapante). Es el encuentro de la Iglesia, de cada una de nuestras almas, con Cristo, el Esposo, que ha bajado a nuestra tierra para buscarnos. Escuchemos, pues, ansiosos la voz de la liturgia, que nos dice: “He aquí que viene a su santo templo el Dominador y el Señor; Sión, sal al encuentro de tu Dios, llena de alegría y de amor.” Vayamos a recibir la candela simbólica y guardémosla devotamente en nuestras casas, para que sea nuestra defensa en las tentaciones y en las tormentas interiores y exteriores, y, como hacían nuestros antiguos, tomémosla en nuestras manos como una confesión de la Divinidad de Cristo y de nuestro amor hacia Él, cuando llegue la hora de nuestro encuentro definitivo.