Reflexión

INDISPENSABLE REFLEXIÓN

Sobre el Sedevacantismo se ha dicho lo que se ha querido, muchos han opinado sobre esta posición teológica y canónica católica sin conocer en profundidad sus verdaderos orígenes y desarrollo, sus verdaderos protagonistas --eclesiásticos de la mayor relevancia jerárquica como intelectual--, sus verdaderos y graves fundamentos dogmáticos, su imperiosa razón de defender a los católicos de la grave apostasía y cisma en el que ahora viven y malviven. Paradójica y curiosamente sus máximos enemigos y detractores han sido aquellos que se dicen "defensores de la tradición católica", estos son los falsos tradicionalistas, todos ellos ex miembros de la FSSPX a la cual hoy día calumnian y difaman con un diabólico resentimiento; dirigidos por una élite infiltrada con psudosteólogos que inventaron laberínticas "tesis" rabínicas-dominicas-jesuíticas, y de una gran malicia al servicio del complot judeo-masónico, y secundados por la complicidad y servilismo de una mayoría de incautos que movidos siempre por la ingenuidad de una cómoda negligencia se alimentan de las "teologías" y de los "teólogos" del facebook o de los blog de la internet. Frente a todos estos paracaidístas devenidos en estos últimos meses al "sedevacantismo" los hay de muchos colores, entre ellos contamos a los desilucionados por el coqueteo de Jorge Bergoglio con los Protestantes, Judíos y Musulmanes, como si Ratzinger, Wojtila y Montini no lo hubiesen hecho antes, estos nuevos "sedevacantistas" creen que solo Bergoglio es hereje formal y material y por lo tanto no es papa, pero los muy incautos "ignorantes en la cuestión" aceptan la misa nueva y los sacramentos dados con el nuevo ritual inválido e ilegítimo de Paulo VI. Los Católicos fieles creemos firmemente que el último Papa de la Iglesia Católica Apostólica Romana fue S.S Pío XII y que de allí por defecto y consecuencia de la Grana Apostasía ha cesado la institución del cónclave y cualquier iniciativa al respecto, solo será una delirante intentona.

viernes, 26 de diciembre de 2014

MENSAJE DE NAVIDAD DE LA SOCIEDAD RELIGIOSA SAN LUIS REY DE FRANCIA 2014



R.P. Emilio J. Fattore SRSLRF
Queridos fieles y hnos. en Jesús, José y María: Hoy estamos celebrando la navidad, el nacimiento del Salvador, el Dios-con-nosotros. Gloria a Dios en el cielo y en la tierra paz a los hombres de buena voluntad, y ¿quiénes son esos hombres de buena voluntad? , Ellos son los que aman a Dios por sobre todas las cosas, los que buscan el reino de Dios y aman a su prójimo por amor a Dios, esos son, esos somos nosotros los que un día hemos sido lavados con las aguas bautismales y pasamos a ser miembros de la Iglesia que Cristo fundó. Hoy es un día de fiesta. Motivos para celebrar, muchos, pero suficiente sólo uno: ¡Dios ha nacido! Qué extraño suena decir que aquel que existía desde el principio haya nacido. Este acontecimiento lleva, sin duda, la firma de Dios, ya que para Él todo es posible. Sería más fácil hacer nacer lo que no existe aun, pero decir que nace lo que existe desde el principio, solo Dios puede realizarlo, porque para Él nada es imposible. Lo eterno no ha tenido miedo de someterse al tiempo. ¡Qué grandeza!, ¡Cuánto amor! Dios ha escuchado nuestros ruegos, ha respondido a las necesidades más profundas de cada persona, ha visto los corazones desolados y entristecidos y ha querido dar una respuesta.
Dios ha respondido a toda necesidad, a toda pobreza, a toda injusticia y muerte, ha respondido con un nacimiento, con un Niño, con su Hijo. Sí, la respuesta de Dios es siempre la vida. El nacimiento de Jesucristo da valor a la vida en medio de una cultura que lleva cicatrices de muerte. Esta fragilidad de un niño envuelto en pañales da esperanza y se convierte en una fortaleza que apela al amor de cada persona. ¡Dios se ha hecho niño!, se hizo frágil y así, necesitado de todos. Por eso san Juan nos dice que aquellos que lo recibieron se les concedió llegar a ser hijos de Dios. Esta navidad debió habernos encontrado con un regalo para Jesús, al menos esa es la costumbre cada vez que celebramos un cumpleaños, pero una vez más Dios se nos ha adelantado, nos ha ganado y ha sido Él el primero en darnos este gran regalo, llegar a ser hijos suyos. La navidad no quiere hablar nada más del nacimiento de Jesucristo, le interesa también hablar del nacimiento de cada uno de nosotros. Es tiempo de hacer realidad la navidad, es necesario, entonces, recibir a Jesús en lo profundo de la vida, ahí donde se puede provocar un nacimiento en nuestras actitudes viejas y desgastadas. Recibamos este día a Jesús, sólo así habrá navidad, novedad, vida, nacimiento. “Y aquel que es la Palabra, que es Verbo se hizo hombre y habitó entre nosotros”.

Este es el acontecimiento que celebramos el día de hoy. ¡Dios se ha hecho hombre! Pero no sólo eso, sino que ha querido habitar entre nosotros. Habitar, entonces, significa cercanía y no indiferencia; compañía y no abandono; amor y no desprecio. Dios toma nuestra condición, la asume y la ama, es por ello que se hace cercano, que se hace compañero, que camina a nuestro lado, que puede salvarnos. La Navidad es así el camino que se ha forjado Dios para estar con nosotros, para cumplir su promesa de salvación. Pero también es la actitud del hombre ante la búsqueda amorosa de Dios. Porque el nacimiento de Jesucristo se ha convertido en signo de la unión entre Dios y los hombres. Este misterio de la Encarnación hace evidente una gran verdad: que el hombre puede estar con Dios y que Dios quiere estar con el hombre. A la Santísima Virgen Madre de Dios hecho hombre, ella que fue la primera anunciadora de este plan redentor, porque la Virgen cuando escucho el anuncio del Arcángel san Gabriel de que iba a ser la Madre de Dios, no se quedó sentada de brazos cruzados, sino que salió inmediatamente a anunciar estas Buenas Nuevas-evangelio- a su prima santa Isabel; a Ella vamos a pedirle en esta santa noche la gracia de la fidelidad, la perseverancia y el poder amar a Dios por sobre todo nuestras mezquindades. ¡Feliz navidad!

martes, 16 de diciembre de 2014

ANÉCDOTAS DE NUESTRO SANTO PATRÓN EN EL MARCO DE LOS 800 AÑOS DE SU NACIMIENTO


San Luis IX  rey de Francia y la Virgen del Carmen



El Santo Luis IX, al volver de la guerra de Palestina, el año 1254, se vio embestido por deshecha tempestad, hallándose frente al Monte Carmelo. Sus navíos fueron dispersados. El desaliento y la desesperación habían se apoderado de todas las tripulaciones.

El naufragio de la armada parecía inminente.

Sólo el corazón magnánimo del monarca mostrábase confiado.
Cuando en medio de la obscuridad el vendaval le trajo el tañido lejano de una campana, y pregunto donde sonaba, supo que era la señal de Maitines de los Monjes del Carmelo.

Vuelve, entonces, los ojos en aquella dirección, y, con ferviente súplica, hace voto de visitar a la Reina del Carmelo, si a él y a los suyos los libra de la muerte.

Bastó esta plegaria. La Reina de los mares se le aparece rodeada de luz, diciéndole: 
“No temas, yo misma seré tu auxilio, vengo para librarte a ti y a tu gente de los peligros de este mar”

Después de estas palabras se serena el cielo, se sosiega el mar, se salvan las naves y el hijo de la reina Blanca de Castilla, acompañado de sus guerreros, sube al Carmelo a rendir afectuosas gracias a su celestial Salvadora.

martes, 9 de diciembre de 2014

SANTA MISA EN HONOR A LA INMACULADA CONCEPCIÓN EN LA CAPILLA NTRA. SRA. DE LUJÁN


Con motivo de celebrarse la solemnidad de la Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen María ayer Lunes 8 de Diciembre, se celebró la Santa Misa en la capilla de nuestra Casa Religiosa de Vedia Bs.As. en dónde la niña Brenda Ferrari Luna recibió su Primera Comunión; compartimos con nuestros visitantes algunas imágenes a manera de crónica.


Todas las fotos véalas en:

lunes, 1 de diciembre de 2014

DOMINGO 1º DE ADVIENTO - BREVE REFLEXIÓN -



Por el Rev. Padre: Gustavo Peña

Queridos lectores, amigos y fieles:

En este 1º Domingo de Adviento el Evangelio de San Lucas nos propone para meditar sobre: la “Incertidumbre del Tiempo y la Brevedad de la Vida”.
El relato de este evangelio es muy parecido, casi idéntico, al de San Mateo que escuchábamos el domingo pasado.
Estos evangelios nos advierten, lo que dijo Nuestro Señor, sobre el Fin de los Tiempos.
No por casualidad, la Iglesia, ha querido poner estos evangelios; uno al final, y el otro al comienzo, del Ciclo Litúrgico; justamente para hacernos comprender la incertidumbre del tiempo y la brevedad de la vida.

INCERTIDUMBRE DEL TIEMPO

“El cielo y la tierra pasarán”, dice Nuestro Señor.
Qué desgraciada será la persona que al final de su vida se da cuenta que puso su corazón y su tesoro aquí en la tierra.
No seamos necios en poner y fijar nuestras esperanzas en este mundo, como si este mundo fuera a durar eternamente.
Este mundo no es nuestra morada perpetua; es el Cielo, es allí donde debemos poner todo nuestro corazón y tesoro.

BREVEDAD DE LA VIDA

Nuestra vida es como una barca, que navega por las aguas de este mundo, y a veces parece hundirse.
Nuestro Señor Jesucristo viene en nuestro auxilio, y para salvarnos nos da la soga de su Redención; pero para ello debemos sacar de la barca de nuestro corazón, todo aquello que nos es innecesario; todo lo que hace peso en nuestra vida: las preocupaciones, los negocios, los defectos y vicios, los placeres, etc.; para poder llegar al puerto seguro que es el Cielo.
Y este tiempo de Adviento, que la Iglesia ha dispuesto en cuatro semanas, en preparación para la Navidad, es para esto; es para preparar nuestro corazón a la venida de Nuestro Señor Jesucristo. Sacar todo aquello que nos impide llegar a Dios, para que Dios nazca en nuestro corazón y renueve nuestra vida.
Este es el tiempo propicio para la conversión, para el arrepentimiento, para hacer obras buenas y así obtener un tesoro en el Cielo.
Pidamos a Dios, por medio de la Santísima Virgen, que nos conceda la Gracia de la Conversión, de nuestra vida, y de la Perseverancia Final en este tiempo de incertidumbre.

+ AVE MARÍA PURÍSIMA