San Luis IX, Rey de Francia, nació el 25 de abril de 1214, y fue coronado a los doce años de edad a causa del fallecimiento de su padre Luis VIII. Por su corta edad, su reinado quedó en manos de su madre Blanca de Castilla, quien lo educó en buenos ideales de vida.
Cuando cumplió la mayoría de edad recibió el título de Luis IX, el 5 de abril de 1234, época en que se unió en matrimonio con Margarita, hija del Conde de Provenza Ramón Berenguer, quien fue parte fundamental como compañera en su reinado y en su camino hacia la santidad. De su matrimonio tuvo once hijos, a los que personalmente dio una excelente educación.
Cuando cumplió la mayoría de edad recibió el título de Luis IX, el 5 de abril de 1234, época en que se unió en matrimonio con Margarita, hija del Conde de Provenza Ramón Berenguer, quien fue parte fundamental como compañera en su reinado y en su camino hacia la santidad. De su matrimonio tuvo once hijos, a los que personalmente dio una excelente educación.
En 1238, Luis IX, Rey de Francia, envia a dos frailes de la Orden de Predicadores, Jacques y André de Longjumeau, para traer la preciosa reliquia de la Corona de Espinas de Nuestro Señor Jesucristo a París desde Constantinopla. El santo Rey construyó la Sainte Chapelle en París para recibirla y fue colocada allí el 19 de agosto de 1239.
ResponderEliminarMuchas felicidades a los miembros de la SRSLRF en el día de su santo patrón y que Dios siga bendiciendo su apostolado.
ResponderEliminarFeliz Día del Santo Patrón San Luis IX Rey de Francia para todos y en especial para el Padre Samuel Mauricio Molina y a toda la Sociedad Religiosa San Luis Rey De Francia!
ResponderEliminarFelicidades y Que San Luis siga protegiendo la Sociedad Religiosa, guíe e inspire a todos y cada uno de sus sacerdotes.Dios los bendiga.
ResponderEliminarPermítame recordar que "hubo un tiempo en la filosofía del Evangelio gobernaba los Estados" (palabras del Papa León XIII). En la foto, estatua de San Luis IX, rey de Francia, célebre por su ardor cristiano, su compromiso con el bien común y la búsqueda de la justicia.
ResponderEliminarUna vez un noble cometió el delito de blasfemia, recibiendo el santo rey numerosos pedidos para eximirle de la pena, por parte de gente influyente y familiares. Pero con él no había "palancas" para pasar por encima de la Ley. Consciente de que quienes ocupan un lugar más importante en la sociedad tienen mayores obligaciones, no cedió a pedidos ni lágrimas y dejó que se le aplique la pena establecida: un toque con hierro candente en la lengua.
Hoy la pena se nos figura excesiva, pero podemos asegurarles que evitaba las reincidencias...