Sobre el Sedevacantismo se ha dicho lo que se ha querido, muchos han opinado sobre esta posición teológica y canónica católica sin conocer en profundidad sus verdaderos orígenes y desarrollo, sus verdaderos protagonistas --eclesiásticos de la mayor relevancia jerárquica como intelectual--, sus verdaderos y graves fundamentos dogmáticos, su imperiosa razón de defender a los católicos de la grave apostasía y cisma en el que ahora viven y malviven. Paradójica y curiosamente sus máximos enemigos y detractores han sido aquellos que se dicen "defensores de la tradición católica", estos son los falsos tradicionalistas, todos ellos ex miembros de la FSSPX a la cual hoy día calumnian y difaman con un diabólico resentimiento; dirigidos por una élite infiltrada con psudosteólogos que inventaron laberínticas "tesis" rabínicas-dominicas-jesuíticas, y de una gran malicia al servicio del complot judeo-masónico, y secundados por la complicidad y servilismo de una mayoría de incautos que movidos siempre por la ingenuidad de una cómoda negligencia se alimentan de las "teologías" y de los "teólogos" del facebook o de los blog de la internet. Frente a todos estos paracaidístas devenidos en estos últimos meses al "sedevacantismo" los hay de muchos colores, entre ellos contamos a los desilucionados por el coqueteo de Jorge Bergoglio con los Protestantes, Judíos y Musulmanes, como si Ratzinger, Wojtila y Montini no lo hubiesen hecho antes, estos nuevos "sedevacantistas" creen que solo Bergoglio es hereje formal y material y por lo tanto no es papa, pero los muy incautos "ignorantes en la cuestión" aceptan la misa nueva y los sacramentos dados con el nuevo ritual inválido e ilegítimo de Paulo VI. Los Católicos fieles creemos firmemente que el último Papa de la Iglesia Católica Apostólica Romana fue S.S Pío XII y que de allí por defecto y consecuencia de la Grana Apostasía ha cesado la institución del cónclave y cualquier iniciativa al respecto, solo será una delirante intentona.
Ernesto Sábato? jaja nadie resiste a un archivo
ResponderEliminarRUBEN CALDERON BOUCHET SOBRE SU CONVERSIÓN GRACIAS AL PADRE CASTELLANI
ResponderEliminar"Leí a Castellani apenas había pasado los veinte años y no tenía ninguna formación religiosa. Me llamó la atención, y lo digo con vergüenza, la calidad intelectual de su trabajo. En el mundo de semiletrados al que pertenecía, un sacerdote inteligente era inconcebible, y en el mejor de los casos se tenía derecho a sospechar que no creería en todas las pavadas con que la Iglesia mantenía la ilusión de su rebaño de beatas. Un esfuerzo suplementario exigido a un instinto todavía no estropeado por mi condición de bachiller podía hacerme admitir en un cura una inteligencia más o menos profunda en cuestiones astronómicas o de alguna otra índole un tanto estrafalaria en nuestras costumbres,pero no cabía en mi calatre la calidad del saber de Castellani y su humor para tomar a broma la totalidad de mis dogmas laicos.
Sin embargo, fue precisamente su vena humorística la que me conquistó enseguida; y como me hacía reír, me aficione a leerlo. No quería confesar mi debilidad; y el amigo que me sirvió de puente, quizá con el santo propósito de enredarme en alguna intriga clerical, obtuvo de mí un pedido desdeñoso que apenas ocultaba el vicio adquirido: “¿No tenés alguna otra cosa del cura ése?”. Ésa fue mi perdición. Era un pagano feliz, totalmente irresponsable y cínico, y terminé confesándome, comulgando y suscribiéndome a la Suma Teológica que Castellani había comenzado a editar con sus sabrosas notas al pie. "